Dedico gran parte de su vida al sistema judicial en el cual, desde su función de fiscal federal, luchó enérgicamente contra la impunidad. Fue el primer representante del ministerio público en plantear la inconstitucionalidad de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final.
Nació en la ciudad de Bahía Blanca en 1947. Para estudiar derecho viajó a La Plata y se graduó de abogado en la universidad nacional de esa ciudad que lo vería hacer sus primeros pasos judiciales cuando, por concurso, ingreso como empleado judicial en el Juzgado del doctor Omar Ozafrain en 1969.
Más adelante dejó la capital y volvió al sur bonaerense para continuar su carrera como Secretario del Juzgado Civil y Comercial de Tres Arroyos, Secretario del Juzgado Penal 3 de Bahía Blanca, y Defensor de Pobres y Ausentes de esa misma ciudad.
En 1986 fue designado Fiscal General federal de Bahía Blanca y, en ese mismo año, pidió el avocamiento de la Cámara Federal de esa ciudad e inició la investigación por los crímenes de lesa humanidad cometidos en jurisdicción del Quinto Cuerpo de Ejército y de la Marina en la zona de Puerto Belgrano.
Un año más tarde, planteó la inconstitucionalidad de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final. Fue el primer fiscal federal en hacer ese cuestionamiento. Posteriormente también objetó los indultos dispuestos por el entonces presidente Carlos Menem.
En su rol fiscal tuvo una intensa actividad en la lucha contra la impunidad respecto de los crímenes de la última dictadura cívico-militar, posicionando al Ministerio Público en un sitio relevante en esa importante tarea y eso le valió el reconocimiento de los diversos organismos de derechos humanos.
Tal es así que también impulsó en 1999 las investigaciones en el el marco de los "Juicios por la Verdad", procesos judiciales que se realizaban en tiempos de las leyes de impunidad a los fines de determinar los sucesos y tratar de hallar los restos de las víctimas pero sin posibilidad de condena penal, en Bahía Blanca y también participó de los mismos en las jurisdicciones de Mar del Plata y La Plata.
Gracias a su labor se pudo comprobar el funcionamiento del centro clandestino de detención conocido como "La Escuelita".
Tal es así que también impulsó en 1999 las investigaciones en el el marco de los "Juicios por la Verdad", procesos judiciales que se realizaban en tiempos de las leyes de impunidad a los fines de determinar los sucesos y tratar de hallar los restos de las víctimas pero sin posibilidad de condena penal, en Bahía Blanca y también participó de los mismos en las jurisdicciones de Mar del Plata y La Plata.
Gracias a su labor se pudo comprobar el funcionamiento del centro clandestino de detención conocido como "La Escuelita".
Por su accionar en defensa por los derechos humanos también viajó a España y allí prestó colaboración con las investigaciones del entonces titular del Juzgado de Instrucción Nº5 de la Audiencia Nacional de España, Baltasar Garzón, realizando diversos aportes probatorios para el esclarecimiento de los hechos cometidos en la jurisdicción del Vto. Cuerpo de Ejército y fue testigo en el juicio al represor Scilingo llevado adelante por la Audiencia Nacional de España.
Integró la Comisión de Fiscales denominada "Comisión de Derechos Humanos del Ministerio Público Fiscal", destinada a desarrollar trabajos de coordinación y colaboración en todas aquellas causas vinculadas a violaciones a los derechos humanos en el período 1976-1983, y particularmente actuó con fiscales italianos en el marco del Plan Cóndor.
Desde la Fiscalía General también investigó también especialmente, casos de corrupción y de afectación del medio ambiente.
Durante más de una década integró la Comisión Provincial por la Memoria -órgano que llegó a presidir- y desde donde promovió la tarea de investigación sobre la memoria colectiva, de resguardo de los archivos y de denuncia sobre las condiciones de privación de libertad violatorias de derechos en la Provincia de Buenos Aires.
Por su labor, recibió varios premios: en el año 2000 el premio “Justicia Universal”, otorgado por la Asociación Argentina Pro-derechos humanos de Madrid; en el 2006 el premio al “Reconocimiento a la trayectoria y el compromiso con la Defensa de los Derechos Humanos” de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad de La Plata y en 2007 el reconocimiento a “Personalidad Destacada de los Derechos Humanos” de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires por su respuesta de rechazo a la Ley de Obediencia debida.
El 3 de enero de 2015 en el kilómetro 496 de la ruta 51, aproximadamente cerca de las 15 horas, perdió la vida en un accidente vial.
Sirvan estas breves líneas de sentido homenaje a Hugo Cañón, un hombre que con su labor y ejemplo prestigió al sistema judicial argentino.
José Ignacio López
Fuentes:
Comisión Provincial Por la Memoria
Asamblea Permanente por los Derechos Humanos
Blog "No Hay Derecho"
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